Si queremos facilitar las tareas de manipulación y almacenaje en nuestra nave, es importante que conozcamos las características de las cargas: tenemos que saber qué mercancías se pueden agrupar formando una unidad de carga y/o cuántas unidades de carga se pueden apilar. Por eso, es importante conocer los conceptos de unidad de carga y agrupación de éstas.

La unidad de carga es un conjunto de productos que se agrupan en un mismo embalaje con el fin de facilitar su manejo.

La agrupación de unidades de carga en el almacén

El número de artículos que se pueden agrupar en una carga depende de la naturaleza y el tamaño de los mismos. Artículos pequeños como tornillos sueltos o en bolsas, tienen que agruparse en bultos o paquetes con formas regulares. Los productos de forma regular también se agrupan para convertirlos en un solo bulto siempre que sean de la misma forma y medida.

El objetivo de la agrupación de unidades de carga es reducir el número de movimientos a realizar durante su almacenamiento, carga y descarga, ya que el manejo de cargas grandes facilita el transporte y almacenaje de las mismas.

También nos encontramos con productos medianos de forma irregular que no se pueden agrupar, bien sea por su forma o bien por el volumen que resultaría al agrupar dos o más unidades.

Existen productos medianos o grandes de forma regular o irregular que por sus características se manejan y transportan formando cada artículo un bulto o paquete único. Pensemos, por ejemplo, en un gran electrodoméstico de cocina.

Resistencia y estabilidad son las 2 cualidades que debe reunir la unidad de carga

La resistencia es importante cuando hay que apilar unos productos sobre otros, en cuyo caso debemos conocer el peso que éstos pueden soportar.

La estabilidad de las cargas tiene que garantizarse cuando éstas están sometidas a movimientos bruscos de transporte o almacenaje. Para lograr una buena estabilidad las cargas o mercancías deben apilarse bien y debe garantizarse una sujeción segura de las mismas.

Los métodos de sujeción de las unidades de carga

Los métodos de sujeción de unidades de cargas más empleados son el flejado y el retractilado.

El flejado consiste en sujetar las cargas hasta lograr un bloque homogéneo. Para ello, se coloca alrededor de la carga o en lugares apropiados, bandas de goma, tiras adhesivas, tiras de nylon o tiras de acero.

El retractilado consiste en envolver la carga en una película de plástico que permita un ajuste perfecto. Este método proporciona una buena protección contra las roturas además de cierto grado de seguridad contra las inclemencias del tiempo o pequeños robos y es un método de sujeción ideal para cargas irregulares.

Lograr la estabilidad de la unidad de carga es fundamental para su manejo durante el almacenaje, carga y descarga.

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