En la entrada anterior hablamos de los aspectos a considerar a la hora de llevar a cabo el diseño de un almacén. Hoy vamos a profundizar en la implantación del edificio y zonas externas del almacén. El próximo artículo versará sobre la distribución interior del almacén.

Es importante tener en cuenta que los camiones de gran tonelaje necesitan espacios para maniobrar amplios y que los muelles de carga y descarga estén adaptados a varias alturas. No podemos olvidar que estos camiones tienen una gran capacidad de carga y, por lo tanto, se reducen costes de transporte.

Accesos y cerramientos

Tanto la planificación de accesos al almacén como la de los cerramientos deben estar orientadas a reducir el riesgo de accidentes en las zonas de carga y descarga.

Los accesos en forma de Y facilitan el tránsito de vehículos entrantes y salientes, permitiendo que el tráfico sea fluido y sin bloqueos que entorpezcan la actividad del almacén.

La carretera de acceso al almacén debe ser de doble calzada Y su longitud será superior al doble del camión más largo.

Las vías de servicio simples dentro del recinto permiten una circulación más segura. Para garantizar una mejor visibilidad al conductor a la hora de maniobrar y retroceder en los muelles el tráfico es mejor que éste esté ordenado en sentido contrario a las agujas del reloj.

La superficie de rodadura será de hormigón puesto que tiene que soportar el peso de camiones de gran capacidad así como condiciones medioambientales extremas.

Tanto las puertas de acceso para vehículos y para peatones tienen que ser independientes unas de otras.

También hay que tener en cuenta que, además de camiones de gran tamaño, otros vehículos menores como carretillas elevadoras por ejemplo, tienen que acceder desde el edificio a la zona de rodadura.

Muelles de carga y descarga

Los mueles son plataformas o estructuras de hormigón adosadas al almacén, para que el suelo esté a la misma altura que la caja del camión. Por eso es importante considerar algunos aspectos antes de decidir dónde situarlos.

1. Utilización del almacén. Es importante conocer los tipos de carga, la frecuencia de las entradas, el espacio para los camiones, etcétera.

2. Situación de los muelles. Será el flujo de mercancías la que nos indique si necesitamos muelles independientes para la recepción o descarga y para la expedición o carga.

3. Posiciones de camión. Hay que tener en cuenta el número de puestos necesarios, que deberá ser igual el número máximo de camiones que puedan descargar y/o cargar al mismo tiempo.

4 Rampas y pendientes de acceso. Tanto unas como otras son necesarias para que las carretillas puedan acceder al interior de los camiones.

Así mismo, también es importante tener en cuenta la necesidad de una zona para que los camiones grandes puedan maniobrar así como una zona de espera para los vehículos.

Zonas de carga y descarga

A la hora de escoger dónde situar las zonas de carga y descarga de un almacén, el factor que más influye en su ubicación es el medio de transporte que se vaya a emplear (camión, buque, ferrocarril, avión). En función de esto, las zonas de carga y descarga pueden estar integradas en el almacén o ser zonas independientes al mismo.

Las zonas integradas en el almacén se construyen en los laterales de este de manera que las carretillas O los medios mecánicos puedan acceder al interior de los vehículos de carga y descarga.

Las zonas independientes suelen estar situadas fuera del almacén, normalmente en un espacio al que tienen acceso directo los camiones o medios de transporte empleados para la carga y descarga. Como es obvio su construcción presentará las particularidades propias de cada medio de transporte.

Como puedes ver, la planificación de las zonas externas del almacén tiene una gran influencia en el posterior desarrollo de su actividad. Hacerlo de manera rigurosa servirá para mejorar la productividad del almacén y garantizar la seguridad del mismo.